El conocimiento de nuestro Medio Ambiente resulta ser un objetivo prioritario, en vistas a resolver problemas de contaminación ambiental, derivados estos últimos de la actividad antropogénica, en el interés de generar bienes o productos de mercado, negociables de acuerdo a las leyes que regulan la economía de los países y que dan fundamento al desarrollo sostenible.
Consideramos imperativo y globalmente necesario, el establecer mecanismos de colaboración e intercambio de información científica y tecnológica, sobre problemas ambientales que impacten significativamente nuestro planeta; tanto en los recursos bióticos como físicos, bajo el principio de que éste es un sistema único y que su destino compromete el de la humanidad toda, así como el de su diversidad biológica, sustento del desarrollo futuro de las nuevas generaciones.
Si bien la atención de los problemas ambientales tanto especiales, como temporales, se centran principalmente hoy, en la perspectiva de problemas de escala global, no es menos cierto que la suma de los problemas de escala regional y local han derivado en la génesis de estos problemas ambientales de extensión planetaria, de ahí, que las soluciones que destinemos a enfrentar estas escalas de problemas, han de tener siempre la consideración integral y de unicidad de nuestros ecosistemas planetarios, como un todo interactuante
Llamamos, al concluir este Segundo Congreso Iberoamericano de Química y Física Ambiental, a profundizar y difundir por toda Iberoamérica la Declaración de Jahuel, 1997 ; y a que la comunidad científica toda, tenga especial consideración en la conformación de una nueva perspectiva de la Educación Ambiental , de modo que centre su atención:
Desde la infancia , construyendo conocimientos, conciencia y nuevos hábitos, acordes con una filosofía de vida ambientalmente sustentable,
incorporando a la vida de los adolescentes elementos racionales de análisis científico de la realidad que constituye su medio ambiente físico, biológico y social, así como finalmente
reforzando a los jóvenes en una cultura de valoración del mundo natural, que dé paso a una concepción ética del mismo, de modo que permita el libre desenvolvimiento de nuestra especie en una convivencia armónica con su entorno y a la vez, inmersa en el compromiso de un desarrollo económico que cautele el bienestar de las generaciones presentes y futuras.
SEGUNDO CONGRESO IBEROAMERICANO DE QUÍMICA y FÍSICA AMBIENTAL
